Las verdades poéticas bien podrían considerarse, desde un punto de vista estrictamente prosaico, gigantescas mentiras.
Claro que, por suerte, yo no comparto demasiado ese escrúpulo burgués -disculpen el anacronismo- por la aparente veracidad de los hechos, esa especie de cientificismo cerril.
Claro que, por suerte, yo no comparto demasiado ese escrúpulo burgués -disculpen el anacronismo- por la aparente veracidad de los hechos, esa especie de cientificismo cerril.
"... -Lo es. Es un hecho indiscutible -clamó el otro, en un arrebato de cordura.
-¡Los hechos! -murmuró Basilio, como quien menciona unos animales extraños y remotos-. ¡Cómo oscurecen los hechos la verdad!"
(G.K. Chesterton, El Club de los Negocios Raros.)
6 comentarios:
absolutamente.
no más comentarios.
:)
Los hechos, los RESULTADOS, las consecuencias, las causas, los móviles...excusas de mediocres, sólo excusas. Saludos
Nada como una paradoja de Chesterton para empezar el día como corresponde. Le agradezco, no la conocía.
uau! es como volver a la facultad leerlo a usted!
Esta de Chesterton no la tenía, grapcias!
la "verdad" es lo mas subjetivo en el hombre... mi verdad, nunca va a ser la tuya, ni la de al lado, ni la del otro... es una maraña q no se si alguna vez se podra desenredar...
Gracias todos. Volví (casi no). Estuve en huelga de bloguismo, pero volví.
Qué grosso Chesterton.
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